Grupo Lamosa finalizó el 2018 manteniendo una estructura financiera saludable, la cual le ha permitido llevar a cabo sus planes de crecimiento dentro y fuera de México. La compañía cumplió con todas sus responsabilidades financieras.

La generación de flujo de Grupo Lamosa, permitió continuar con el plan de inversiones de la compañía, invirtiendo durante el año la cantidad de $757 millones de pesos. Dichas inversiones estuvieron mayormente destinadas a mejoras en productividad en las plantas del Grupo, así como también a la implementación de tecnologías de información para robustecer las operaciones en Sudamérica.

Grupo Lamosa terminó el año con una deuda neta consolidada de $7,864 millones de pesos, cifra similar a los $7,873 millones de pesos del 2017. Al cierre del año, registró un nivel de apalancamiento adecuado para seguir soportando el crecimiento de la compañía. La relación deuda neta a Ebitda se ubicó en 2.4 veces, ligeramente superior a la relación de 2.3 veces registrada al cierre del 2017.

Durante el año, la compañía mantuvo su participación dentro del programa de Analista Independiente de la Bolsa Mexicana de Valores, con la finalidad de seguir ofreciendo a los inversionistas información de análisis sobre la compañía, para una mejor toma de decisiones.

La Asamblea Anual de Accionistas de Grupo Lamosa decretó en 2018 el pago de un dividendo en efectivo, a razón de $0.70 pesos por acción, pagadero a partir el segundo trimestre del año.

Durante el 2018, la compañía no llevó a cabo operaciones de compraventa con acciones representativas de su capital social.